El cotejo avanza irreprochable hasta que llega al verso 1354:
«O God, I could be bounded in a banana peel and count myself a
king of infinite space, were it not that I have bad dreams.»
Borel pulsa el botón del intercomunicador y su voz truena en el inmenso taller:
—Casi, chicos. Buen intento. Volvemos a empezar.
El sinfín de diligentes monos regresa ipso facto a los teclados de sus infinitas underwoods.
Perfecto, muy sarcástica visión del teorema de los monos y el infinito… Me ha sacado la primera risa del día.
¿Cómo se llamaba el cuento aquel de Lafferty? No lo recuerdo, porque perdí la antología «Imperios Galácticos» de Aldiss…
«Mucho, mucho tiempo», creo que era.
«Maldita n, la máquina está atascada» era el verso clave, si no recuerdo mal.
De hecho, era:
Desde esta sesión queda vedada
Toda ave de ala tiranna,
Salvo el águila, pluma soberanna:
Maldita máquinna, la n está atascada.
Ya que estáis, aprovecho el comentario para decir que todas las antologías de Lafferty que han pasado por mis manos eran fabulosas.
De hecho, después de leer un par de ellas me pregunto qué ha hecho el pobre Lafferty para no tener una fama parecida a la de Lem.
No tener a Alianza Editorial como editora, supongo.
Exactamente la razón por la que ni se me ocurre intentar publicarlas :)